Los beneficios de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) para las empresas cubren una amplia visión: desde las ventajas que supone tener políticas de empresa concienciadas con el entorno y la sociedad, hasta la mejora de la gestión de los recursos humanos. Uno de los factores en los que más se fija el empresario es, lógicamente, el beneficio. ¿Cuáles puede tener la Responsabilidad Social Corporativa en las empresas?
Si bien los beneficios de la Responsabilidad Social Corporativa se aprecian a medio y largo plazo en lo que a rentabilidad económica se refiere, cuando implantes un plan de RSC en tu empresa verás lo rápidamente que empiezas a vislumbrar sus ventajas.
Las múltiples ventajas que generan estas políticas hacen que las razones para implantar la responsabilidad social corporativa en la PYME sean muchas, y muy interesantes. Además de la consabida mejora de la imagen y del cambio de la proyección de tu empresa de cara al exterior, la capacidad de la RSC para mejorar el sistema de gestión de las empresas es sorprendente, sobre todo de cara a la gestión de los recursos humanos.
Entre los muchos beneficios de la Responsabilidad Social Corporativa para la empresa, el concepto del salario emocional es uno de los más atractivos. Por un lado comprende aspectos intrínsecos al propio trabajador, con factores clave como el reconocimiento del trabajo realizado, la propia satisfacción, la asunción de responsabilidades, es decir, todo aquello que nos hace sentir orgullosos de lo que hacemos. Un buen plan de responsabilidad social corporativa no puede obviar estos aspectos, tan importantes para el trabajador. Y por otro lado, estarían aspectos extrínsecos como las retribuciones flexibles, las medidas de conciliación vida personal/laboral, etc.
La implantación de estas políticas de RSC tan favorables a los trabajadores genera en la plantilla un fuerte arraigo en la empresa, creando un sentimiento de pertenencia que mejora los resultados, el ambiente laboral y la imagen de la compañía. A todos nos gusta trabajar en una empresa de la que nos sentimos orgullosos, y esto es algo que se refleja en el rendimiento de las plantillas.
Por otro lado, los beneficios de la Responsabilidad Social Corporativa también se pueden contemplar desde un punto de vista más conservador. Por ejemplo, en lo que respecta a evitar riesgos o sanciones para la empresa. Una estrategia de Responsabilidad Social Corporativa puede prevenir escenarios no deseados para el empresario, que tal vez ni siquiera los haya visto venir.
Las sanciones en estos campos son muy duras, pero perfectamente evitables; y por otro lado, las administraciones públicas ponen muchas facilidades para que las empresas solucionen sus carencias antes de sancionar.
El empresario con visión de futuro sabe que tomar medidas al respecto supone una inversión en el negocio, y no un coste como muchos (anclados en el pasado) quieren creer.
La RSC y las estrategias responsables generan importantes beneficios económicos para las empresas a través de la creación nuevos productos, la apertura a clientes distintos a los de siempre, la reducción de gastos energéticos y/o de transporte, la prevención del absentismo laboral.
Diseñar e implementar un plan de RSC en tu empresa no es ya una opción: es el camino hacia un futuro mejor para todos, que además puede suponerte importantes beneficios (intangibles y económicos). Las empresas comprometidas y socialmente responsables son cada vez mejor apreciadas por unos consumidores que cuentan con muchísima información, y miran con lupa en qué se gastan su dinero. Los beneficios de la Responsabilidad Social Corporativa están ahí fuera, esperándote: ¿a qué esperas para hacerte con ellos?